INFORMACIÓN DESDE LA CARCEL DE TOPAS -Salamanca-:

INFORMACIÓN DESDE LA CARCEL DE TOPAS:

Lucio García Blanco:

25 marzo 2012

“En las cárceles, la verdad es que el ambiente aquí dentro suele ser un reflejo de la calle, teniendo en cuenta que aquí hay mucho lumpen, al que el propio Marx denominaba como “la putrefacción de las clases bajas”. En general, gente sin apenas valores y principios, y que no tiene otro norte que vivir sin trabajar o el andar colgado de las drogas. Ni que decir que tiene que estas características les hace vulnerables a todo tipo de tendencias, lo mismo se pueden dejar llevar por los vientos contrarrevolucionarios que por los revolucionarios. Es cierto que en las décadas de los 70 y 80 , hubo prisiones con un movimiento de lucha importante paralelo a las luchas de los trabajadores y el movimiento por la ruptura democrática que se dio en la calle. Esto fue controlado aquí, poco a poco, a través de las reformas penitenciarias, que dividieron a los internos en distintos regímenes de vida interna, y así mismo por grados de evolución en las condenas, para alcanzar distintos beneficios e ir saliendo de permisos y, finalmente, conseguir el tercer grado, la libertad condicional, y en definitiva los recortes de condena.

Otra de las cuestiones que influyeron en el control de las luchas y de los internos aquí, fue la drogadicción general. Al margen de que se pueda colar de la calle cierta cantidad de drogas, instituciones penitenciarias suministra a los presos metadona y multitud de pastillas de todos los colores y efectos. Eso tiene atados a muchos. A parte del ambiente general, entre estos muros así mismo se encuentra alguna gente maja, que está por cosas circunstanciales, y no es delincuente habitual. Dentro de los delincuentes también suele haber alguno con algo de conciencia de clase. En nuestro módulo, somos unos 120 presos.

Curiosamente, ayer mismo ha llegado una circular de la directora por la que no permiten que los internos se puedan quedar en las celdas a diario (sin bajar al patio) por las tardes, así como los fines de semana por las mañanas. A mucha gente, las 8 horas de patio se le hacen pesadas y largas, porque apenas hay posibilidad de hacer alguna actividad. En fin, que el personal está bastante molesto por la medida”