UNA AGRICULTURA PRODUCTIVA (NO PRODUCTIVISTA) CON AGRICULTORES-

En este sistema capitalista, lo único que vale la pena es el conseguir poder de mercado, el vender sus productos de la manera más cara posible.
Mientras los campusinos, su mayor preocupación no fue el vender su producción, pues ese no era el problema, sino el conseguirla de la manera fue fuese lo mas duradero posible, dentro de las posibilidades que daba la tecnología que tenía a mano, artesanalmente:
Conseguir una producción con la mejor calidad, la mayor cantidad y al menor costo, su comercialización no era su mayor preocupación, pues aunque vivía dentro de una sociedad capitalista, realmente la unidad económica campesina estaba alejada de esos intereses y manejos, pues trabajaban especialmente para su autosuficiencia, debido a que la tierra cuidada y trabajada, daba lo suficiente para el consumo y la reproducción del sistema campesino económico, que sólo lo distorsionaba las duras imposiciones del Señor y el Estado al servicio de sus intereses burgueses de guerras mediante levas forzosas, e imposición de precios que dificultaban el conseguir beneficios suficientes para comprar servicios y productos procedentes de las ciudades.
Mientras el sistema capitalista sólo produce para vender, e intenta conseguir los productos más baratos para conseguir el mayor beneficio, intentándolos vender a los precios más caros posibles, hace que esta política económica se enfoque al oligopolio, buscando siempre alianzas y absorciones con otras empresas, e incluso influencia favorable en el Estado, para controlar y dominar una política de precios a su servicio, tendiendo siempre a la acumulación de capital.
Por eso, la calidad del producto no es lo más importante dentro de la producción capitalista, pues todo esta enfocado principalmente a que el trabajador en su faceta de consumidor “forzoso” elija aquel producto que mas le llame la atención, le sea atractivo y cercano a él, para así no tener que esforzarse lo mas mínimo posible tanto en lo puramente físico como en lo psíquico.
Cuando hablo de la condición de consumidor forzoso al trabajador, es debido a que el trabajador especialmente urbano, está alejado del campo que le pueda satisfacer en su autoconsumo, y toda su fuerza de trabajo, está pensada para ser alquilada o utilizada para vender su producción o servicios, con lo cual, no tiene más remedio que comprar todo lo suficiente para la satisfacción de sus necesidades y deseos.
Cuando comento que el consumo del trabajador debe serle fácil y evite el esfuerzo, lo deduzco de la propia actividad mercantil de las grandes distribuidoras y superficies que proyectan supermercados cercanos y con una amplia variedad que logra que el trabajador consumidor no tenga que ir a mas de un establecimiento, buscando cualquier cosa. Por otro lado, estas también se instalan en centros comerciales – hipermercados con grandes aparcamientos para que pueda el trabajador se desplace con su coche, lo estacione fácilmente y no tenga que caminar para su compra.
Para esto, es fundamental el tener una rede de transporte a su servicio que le acerque a todos los rincones donde sea rentable con actuales y potenciales consumidores.
El producto en este sistema en el que vivimos, debe ser llamativo y se diferencie del resto, no por su contenido si no por su apariencia que puede sugerir unas cualidades extraordinarias que den la felicidad y una calidad de vida sorprendente. Para esto, se necesita invertir enormes cantidades de capital líquido que establezca medidas publicitarias que promuevan la fidelización consumidora de la mayor población posible, y así imponer su precio con el poder de mercado que le brinda el monopolio de un artículo concreto.
Si la mercancía que quiere vender no da posibilidad a una marca distintiva que le dé un valor añadido que le favorezca a dominar su precio, busca mediante negociaciones en uniones y/o fusiones y/o absorciones acaparar el mercado para imponer el precio a su deseo.
Por eso, no es tan importante el saber producir sino el saber vender dentro de una economía capitalista donde empieza a sobrar dentro de una población trabajadora del primer mundo que está llegando a un tope en su capacidad de consumo, y no puede absorber todo lo que se produce, con lo cual no interesa su producción si no hay perspectivas de altos beneficios, pues el resto de la población trabajadora del tercer mundo no tiene suficientes ingresos para absorber la producción al precio que viene impuesto.
Mientras que la economía campesina se preocupaba en producir para reproducir el sistema, es decir, intentaba sacarle el mayor fruto a la tierra pero llegando a una línea, según criterios definidos por la cultura tradicional, para así cuidarla, para que se pudiera seguir aprovechando de su capacidad a largo plazo. El productivismo agrícola, sólo plantea explotar lo máximo la capacidad de la tierra sin reflexionar sobre su cuidado, pues para seguir extrayendo sus riquezas sólo se plantea que no hay mas remedio que destinar recursos en comprar inputs industriales que faciliten una producción masiva, aunque más empobrecedora de los recursos de medioambientales, que obligan al productor a tener que gastar cada vez mas en ellos, para sacar rendimiento.
Los campusinos quieren ser productivos, y que lo que produzcan beneficien a todos, a ellos con sus ingresos de venta y al resto de la sociedad, especialmente la clase trabajadora que son sus clientes con alimentos y útiles de calidad. Por eso, no buscan en sí, la ventaja de la exclusividad mercantilista mediante el dominio del mercado con el que consigan imponer sus productos y sus precios a costa de lo que sea.
Generalmente la autoayuda y el asesoramiento mutuo predominó en la comunidad, mediante relaciones personales-familiares y de trueque que ayudaban a la autoproducción.
Los trabajadores siempre son la base fundamental de la producción de riqueza a través de su trabajo en todos los sectores, tanto en materias primas, elaboración o servicios que diesen calidad de vida a todos.
Pero, precisamente por eso, el mayor deseo de la burguesía es tenerlos controlados, mediante un Estado a su disposición, el cual hacía la función policial e impositiva-tributaria. Todas las demás funciones que se le demanda, fueron asumidas cuando vieron una protesta que se le imponía por la conciencia de clase trabajadora.
Incluso el poder tener un medioambiente saludable, fue desde el principio una reivindicación social que diese salud a su vida.